lunes, 24 de octubre de 2011

Wunderlist

Wunderlist es un eficiente administrador de tareas o asuntos pendientes que posee versiones para Windows, MAC OS X y dispositivos portátiles Android, iPhone y iPad , además de una interfaz web accesible desde cualquier navegador.. 


Wunderlist cuenta con una interfaz de usuario muy bien elaborada para que puedas organizar tus actividades diarias y asignarle prioridades a las mas importantes, con el agregado de que los datos son almacenados en la nube y sincronizados automáticamente al acceder a estos y ser modificados desde el ordenador, los dispositivos portátiles o desde la web. Además puedes trabajar en colaboración con otros usuarios de la aplicación y compartir tus listas de tareas por correo electrónico.






jueves, 20 de octubre de 2011

Launchy


Launchy es un lanzador de aplicaciones gratuito y de código abierto para GNU/Linux y Microsoft Windows. El programa indexa accesos directos en elmenú inicio y archivos en carpetas específicas, permitiendo un acceso más rápido a los programas habituales sin abrir el menú en sí mismo ni buscando la carpeta correspondiente.


Launchy se carga automáticamente en el arranque del sistema operativo y espera que el usuario pueda llamarlo pulsando Alt+Espacio o una combinación de teclas rápidas. El usuario entonces comienza a escribir el nombre del programa o archivo que desee poner en marcha. Launchy busca automáticamente en su lista los resultados más similares. Cuando encuentra el programa deseado, el usuario presiona --> Entrar y el programa es automáticamente puesto en marcha.

Launchy también tiene la opción de añadir carpetas y formatos de archivo en su catálogo de indexación indización. Esto hace que sea útil para el lanzamiento de casi cualquier cosa en un ordenador, incluida Internet, música, vídeos y juegos. Launchy también puede ejecutar Google, Wikipedia, MSN, Yahoo y otras búsquedas, que se ven en el navegador predeterminado. Asimismo, abre los favoritos, según sea necesario. Launchy también soporta plug-ins, lo que aumenta su versatilidad.




Moodle


Moodle es un Ambiente Virtual Educativo, sistema de gestión de cursos de formación, de distribución libre, que ayuda a crear y mantener comunidades de aprendizaje online. Este tipo de plataformas tecnológicas se conocen como LMS (Learning Management System).
La primera versión de la herramienta apareció el 20 de agosto de 2002, desde entonces han aparecido nuevas versiones de forma regular. Hasta 2011, el número de usuarios registrados es de casi 43 millones, distribuidos en 54.366 sitios en más de 85 idiomas. España es el segundo país del mundo, detrás de E.E.U.U., en número de sitios en funcionamiento, con 4.990. La Consejería de Educación de la Región de Murcia, la Universidad de Barcelona y la Europea de Madrid son tres de los sitios más importantes por número de usuarios y cursos.
La filosofía de Moodle se basa en el constructivismo social de la educación, enfatizando que los estudiantes (y no sólo los profesores) pueden contribuir a la experiencia educativa en muchas formas. Las características de Moodle reflejan esto en varios aspectos, como hacer posible que los estudiantes puedan contribuir a crear glosarios o trabajar colaborativamente.
El objetivo de Moodle es facilitar a los educadores las mejores herramientas para gestionar y promover el aprendizaje, pero hay muchas formas de utilizar la plataforma:
  • Permite gestionar cientos de miles de estudiantes y cursos, pero también puede ser utilizado en escuelas de educación infantil y primaria o en empresas para la formación continua.
  • Muchas instituciones lo utilizan como plataforma de formación online, otras lo utilizan como apoyo a la formación presencial (conocida como “blended learning”).
  • Muchos usuarios utilizan actividades como foros, bases de datos o wikis para construir comunidades colaborativas de aprendizaje alrededor de una materia, otros prefieren utilizar la plataforma para ofrecer contenidos a los estudiantes y realizar las evaluaciones usando tareas o cuestionarios.


lunes, 17 de octubre de 2011

Moodle

Una vez que se toma la decisión de implantar un LMS, como puede ser Moodle, como herramienta de apoyo a la docencia presencial empieza para muchas instituciones educativas un pequeño calvario que en la mayoría de los casos conduce a un resultado final más bien dudoso.




   Los errores suelen ser siempre los mismos, por lo que es fácil hacer una relación de los más habituales y proporcionar una serie de consejos que eviten que uno o varios de estos errores lleven al traste nuestro proyecto. 

  El primer error suele ser “no considerar la implantación de Moodle como lo que es” , un proyecto de implantación de un sistema de información. Muchas implantaciones de Moodle se hacen sin objetivos, sin planificación de las fases, sin análisis de costes, sin plan de formación, sin...... 

   Cuando aborde la implantación de Moodle defina previamente estos elementos; en muchos casos basta con hacerse una serie de preguntas y tras obtener las respuestas, registrarlas en un documento que sirve de guía al proyecto: 
  • ¿Qué objetivo global quiero conseguir? Uno, el que resume el “por qué” de la decisión de implantar Moodle 
  • ¿Qué objetivos operacionales tengo a corto, medio y largo plazo?. Indique qué quiere conseguir y dónde. 
  • ¿Cómo impactará en el desarrollo habitual de mi actividad y qué procesos internos deberán ser modificados? 
  • ¿Cuántas fases va a tener el proyecto y qué hitos las marcarán? ¿Con qué presupuesto económico cuento? 
  • ¿Qué elementos tecnológicos voy a necesitar? 
  • ¿Quién va a liderar el proyecto? 
  • ¿Con qué personas internas o externas voy a contar, y con qué dedicación? ¿Cómo voy a medir el avance del proyecto? 
En muchas ocasiones, la elaboración de esta planificación requiere la ayuda de un experto externo a la organización, un consultor o asesor, capaz de optimizar este proceso de análisis y de poner unos buenos cimientos al proyecto. 

   De la no planificación anterior se deduce un segundo error relacionado con el planteamiento económico del proyecto. En muchas ocasiones se confunde que las licencias del software que implantamos sean gratuitas, como es el caso de Moodle, con que no tendremos costes asociados a su implantación; esta errónea apreciación nos lleva muchas veces a no hacer una provisión económica adecuada que hará imposible la puesta en marcha del proyecto. 

   ¿Cuales son estos costes en los que vamos a incurrir?. Básicamente de tres tipos: costes asociados a la planificación y gestión del proyecto, costes de equipamiento y adecuación tecnológica y costes de formación del personal. 
  • Los primeros hacer referencia a los costes del personal interno y/o externo que participe en el análisis, implantación, puesta en marcha y soporte postprodución de la plataforma. 
  • Los costes tecnológicos hacen referencia a la adecuación de las infraestructuras, adquisición de equipos o a los contratos de hosting de la plataforma. 
  • La tercera partida, fundamental, hace referencia a los costes del plan de formación de los usuarios de la plataforma, ya sean estos docentes o alumnos. 
  • La cuarta partida que aparece en todos los proyectos TIC, la partida de licencias de software, es la que nos ahorramos cuando utilizamos productos de libre distribución. Y esta es la ventaja competitiva de Moodle respecto a otras plataformas propietarias. 
   Vamos a por el tercer error más común: la falta de implicación de los diferentes estamentos organizacionales afectados. Es muy común que un proyecto de implantación de Moodle sea promovido por un determinado departamento docente, normalmente el departamento de tecnología, o incluso por un único profesor conocedor de las virtudes del producto, y que todo comience por con el uso de una maqueta del producto en un servidor interno; al fin y al cabo, el software es gratuito. Posteriormente, el promotor realiza una labor de concienciación del resto de la organización, muy cercana al proselitismo, intentando obtener apoyos para abordar un proyecto más amplio y finalmente, tras un periodo que varía entre unos centros y otros, el tema quede reducido a un elemento residual. ¿Dónde está el error?. A mi juicio, en la falta de apoyo de la dirección; quien desee promover en su organización una herramienta como Moodle debe obtener el apoyo incondicional de la Dirección, que a su vez, debe implicar a los diferentes niveles, de arriba a abajo, con un espíritu colaborativo e integrador. 

 El cuarto error se comete cuando la situación anterior se da la vuelta y se aborda la implantación con un exceso de entusiasmo y como ya hemos dicho antes, poca planificación. El usuario, poco o nada formado, empieza a utilizar la herramienta de forma intuitiva, con más o menos fortuna, sin criterios pedagógicos comunes, sin un apoyo técnico adecuado y, lo que es más grave, con una dedicación de tiempo excesiva para los resultados obtenidos. 

 En el mejor de los casos, el material generado será de dudosa calidad, y en el peor, el cansancio y la decepción harán mella en el docente que ve cómo su gran esfuerzo le proporciona muy pocos resultados. 

 El consejo es bien simple: elabore un plan de formación adecuado y póngalo en manos de un experto en el producto; el coste económico será siempre inferior al de un proyecto fracasado o con resultados inadecuados. 

   Para terminar, quinto y último error que comentaré: enfocar la implantación de Moodle desde una óptica meramente técnica. La implantación de una plataforma elearning tiene una componente funcional y operativa muy importante en muchos de los procesos educativos, afecta a las programaciones de las materias, a los sistemas de evaluación, a los informes de rendimiento de los alumnos, a los recursos didácticos utilizados. Es algo más que poner un programa informático a disposición de los profesores, es un cambio en la metodología didáctica. 

   No deje la implantación exclusivamente en manos de su proveedor de infraestructuras habitual o de su personal técnico interno. Cree un equipo mixto, con técnicos y con docentes, y si es necesario, como ya hemos comentado anteriormente, incorpore un asesor externo que pueda aunar las dos visiones y facilitar que su proyecto sea todo un éxito. Haga un piloto con un pequeño grupo de docentes, analice las dificultades corrija los errores; cuando el piloto esté a punto, haga extensivos los resultados al resto de la organización, que podrá trabajar sobre terreno seguro. 

 Espero que estos consejos le sirvan para tener éxito en su próxima implantación de Moodle.